Plegaria de los que sirven a los enfermos

Señor Jesús Cristo,
Somos tu Cuerpo místico sobre la tierra.
Si uno de los miembros de tu Cuerpo sufre, todo el Cuerpo sufre.

Danos la compasión por tu pueblo como la que Tú mostraste en tu ministerio, y la que el Beato Pier Giorgio Frassati imitó en su servicio con los enfermos.

El solía decir:
“Ningún ser humano debería ser abandonado. Pero la mejor de todas las caridades es la que se consagra a los enfermos”.

Danos, como él tuvo:
“El coraje para enfrentar sus dificultades y peligros, para asumir como propios los sufrimientos de otros, sumados a nuestras propias necesidades y nuestras propias preocupaciones y cuidados”.

Porque al servir a los enfermos, nosotros te servimos Señor Jesús, que “viniste no para ser servido, sino para servir, y dar tu propia vida como salvación de todos”. Amén.